martes, 26 de mayo de 2009

Intervención de la candidata andaluza al Parlamento Europeo Elena Benítez en el acto de campaña en Sevilla el pasado 24 de mayo

15:32 |

Buenas tardes a todas y a todos.

Bienvenidos a este acto de movilización por el empleo. Un acto que se celebra en plena campaña electoral para las Elecciones Europeas del próximo 7 de junio.

Las elecciones para el Parlamento Europeo son la oportunidad para empezar a construir los cimientos de una nueva Unión Europea y abrir una nueva perspectiva de cambio para Europa.

Estamos inmersos en una profunda crisis financiera, económica y social, una crisis del sistema capitalista.

Y sólo el voto a Izquierda Unida en las próximas elecciones es la garantía de que desde el Parlamento Europeo se promuevan políticas sociales en defensa del empleo,

el desarrollo sostenible y la protección medioambiental.

Aunque podamos pensar que estas elecciones no van con nosotros, los ciudadanos y ciudadanas nos jugamos mucho, porque desde el gobierno europeo se toman decisiones que pueden contribuir a frenar el desarrollo urbanístico insostenible que sufrimos en muchos municipios de Andalucía.

Ha sido una vergüenza ver a los eurodiputados españoles del PSOE y del PP votar en contra del informe Auken, donde se denuncian las barbaridades urbanísticas y la falta de iniciativa de los gobiernos autonómicos y estatal.

Como decía Billy Meyer en el Parlamento Europeo: El Urbanismo en España es una cuestión de Estado que afecta a nuestro desarrollo económico, a nuestro sistema de justicia y a la transparencia de nuestras administraciones.

Cuestiones en las que el PSOE y el PP miran para otro lado...

También se aprueba en Europa medidas que afectan al tipo de interés que soportan nuestras hipotecas y que asfixian nuestras economías.

Y es en Europa donde se promueven medidas que acaban afectando al mercado laboral de los países miembros.

Por tanto, las decisiones que se toman en la Unión Europa nos afectan directamente a todos y a todas.

Por muy lejos que nos parezca Europa, es ahí donde se toman acuerdos como los fondos de cooperación, las políticas agrarias, las medidas medioambientales, las políticas de vivienda o la regulación del mercado laboral.

Es por eso que desde Izquierda Unida tenemos un objetivo claro: obtener una representación fuerte que defienda los intereses de los más débiles, los intereses de los trabajadores y trabajadoras para que no seamos los que paguemos esta crisis impuesta por las políticas neoliberales que defienden tanto el PSOE como el PP.

Una crisis que nos reta a construir la resistencia de la gente y a abrir una perspectiva de cambio en Europa.

El único camino para salir de esta crisis es luchar por una Europa democrática y social y por una Europa que sitúe la economía al servicio de las personas y no las personas al servicio de la economía.

No nos gusta la Europa que se está construyendo, una Europa que deteriora el medio ambiente, los servicios públicos y el estado del bienestar.

Frente a la defensa de la flexibilidad laboral y las privatizaciones que defienden el PSOE y el PP en Europa, Izquierda Unida plantea una apuesta seria y rotunda por lo público y una apuesta clara por el empleo y las conquistas sociales.

Izquierda Unida es el antídoto contra la Europa del capital que, sin sonrojarse, promueve la jornada laboral de 65 horas y el desmoronamiento de las conquistas históricas del movimiento obrero.

Desde Izquierda Unida también nos preocupamos por los ciudadanos y ciudadanas y nuestro entorno. Lo hemos demostrado impulsando políticas medioambientales y de desarrollo de las energías limpias en el marco comunitario, y lo seguiremos haciendo.

Izquierda Unida y los partidos de la Izquierda Europea exigimos que esta Europa sea una Europa de paz y civil, una Europa feminista y desarrollada sobre la base de la democracia y la solidaridad.

El voto a Izquierda Unida es una opción de compromiso con la Europa de las personas y las libertades.

Como decía Cayo hace poco, una Europa social con “rostro humano” frente a la Europa del capital y el recorte de los derechos de la actual Unión Europea.

Esta es nuestra razón de ser. Esta será nuestra voz en Europa.

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